NIÑOS Y ADOLESCENTES

Los tratamientos psicológicos para niños y adolescentes deben proporcionar técnicas que permitirán fomentar sus habilidades y facilitar su desarrollo personal. Para ello necesitas que el psicólogo se gane la confianza de tu hijo/a creando una vínculo de simpatía y cercanía para que quiera ir a terapia. Y para los padres, que os ofrezca instrucciones y pautas para poder seguir ayudando a tu hijo en casa.

La infancia es el primer periodo vital que comprende desde el nacimiento hasta la adolescencia y es una etapa crucial para el buen desarrollo posterior. Algunos niños tienen ciertas dificultades en el lenguaje, en atención, en conducta o, incluso, problemas emocionales relacionados con su contexto inmediato. Es importante intervenir y recurrir a profesionales para poder redirigir una buena evolución y poder potenciar en ellos una buena autoestima y bienestar.

La terapia en estas etapas más precoces requiere del trabajo inclusivo con los padres y trabajo coordinado con la escuela.

La etapa del adolescente es una de las más difíciles del ciclo vital ya que se producen muchos cambios, tanto a nivel físico (la pubertad) como a nivel psicológico. Es una etapa de transición donde el adolescente busca su propia identidad pero sin desligarse de los amigos ni del núcleo familiar. De aquí pueden derivar inseguridades, problemas de comportamiento, relacionados o no, el fracaso escolar, dificultades para relacionarse con los iguales y todo eso, se los puede crear mucha angustia y malestar.

Cuando los propios recursos no son suficientes para poder abordar esta etapa del ciclo vital, y se produce este malestar, pedir ayuda a psicólogos profesionales puede ser una buena solución. Desde el centro ofrecemos un servicio personalizado y especializado en la resolución de este tipo de conflicto.